Imágenes en Palabras para Trabajadores Cristianos

Si una foto vale más que mil palabras, entonces una imagen en palabras también tiene gran valor para los que estudian la Biblia. Estas imágenes con palabras, llamadas metáforas, nos pueden ayudar a profundizar en la verdad de Dios. En 1 Corintios 3 y 4 se encuentran siete imágenes con palabras que pueden ser útiles para los que están envueltos en el servicio Cristiano. El Apóstol Pablo está corrigiendo las ideas equivocadas de los corintios acerca de los ministros del evangelio. Algunas veces él usa una metáfora explícita, y otras veces sugiere una imagen con palabras. De estas obtenemos una valiosa revelación de lo que significa ser un ministro del evangelio para el pueblo de Dios. Note que cuatro de las imágenes con palabras se refieren a la relación del obrero con los demás, y tres se refieren a la relación del obrero con Dios. Vamos a estudiarlas en ese orden.

En 3:1-2 él toma el rol de un padre spiritual. Se sugiere que el rol materno es alimentar a sus hijos debidamente. Normalmente, una mamá alimenta a sus hijos pequeños con leche hasta que pueden procesar alimento sólido. Así como una mamá alimenta a sus hijos con el alimento apropiado para su edad, así el ministro tiene la responsabilidad de alimentar a las personas de acuerdo con sus capacidades espirituales. La metáfora de una mamá también se encuentra en 1 Ts 2:7-8 en donde Pablo quiere que sus lectores entiendan cómo él les ha cuidado tiernamente como una nodriza y les ha cuidado mientras les imparte su vida a ellos.

1 Cor 4:15 también hace una comparación con un padre, él sugiere que espiritualmente nacieron de él, está atado filialmente y es espiritualmente responsable de ellos. En 4:16 les urge: 'os ruego que me imitéis'. La palabra imitar (>mimeomai) es la raíz de la palabra mímica, y sugiere la tendencia de un niño a imitar a los adultos, especialmente a los padres. De esta manera, él toma el rol paterno del amoroso líder y modelo. En una metáfora similar en 1 Ts 2:10-11, el rol del padre incluye exhortar, confortar, y guiar. La responsabilidad del ministro como-padre es el amoroso cuidado y guia.

En 3:5 Pablo se llama a él y a Apolos 'ministros'. Esta designación viene de la palabra diakoneo, que significa servir, y era usada comúnmente para quien sirve las mesas (cf. Jn 12:2; Hch 6:2). Esta es una asombrosa imagen en palabras ya que los griegos antiguos tenían aversión a servir voluntariamente a otros. Él vuelve a usar el término al describirse en 2 Cor 4:5 y dejar en claro que el enfoque central de su ministerio era la predicación de Cristo Jesús, y no él mismo. Él sólo era un siervo de la voluntad de Dios. Tal humillación del obrero Cristiano lleva a los demás a seguirle (cf.16:15- 16). Está guiando con su servicio.

En 3:6 encontramos una imagen en palabras que evoca a un jardinero: 'Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios'. Es una comparación de propia humillación para que Dios reciba el crédito del cambio en la vida de los demás. El papel del jardinero simplemente es plantar y cultivar y Dios da el crecimiento (v. 7). Aunque el trabajo hortícola del ministro, como instrumento, es de suma importancia en el proceso ordenado de Dios para cambiar las vidas. Los Cristianos que trabajan arduamente en el jardín son recompensados por su labor (v. 8).

Él cambia a una metáfora de arquitectura en el verso 10 en donde se compara con un 'perito arquitecto' que pone los cimientos. El trabajo del constructor se describe con una palabra: (epoikodomeo, vv. 10, 12, 14) esta se usa figurativamente para fortalecer o construir Cristianos (cf. Hch 20:32; Col 2:7; Jud 20). La metáfora se usa para enfatizar la importancia de métodos y motivos puros en el ministerio. Un obrero Cristiano puede construir de una manera digna o indigna. Cuando se pruebe la obra dejar ver su calidad (vv. 12-13) y Dios, como corresponda, va a recompensar (vv. 14-15). Por eso, cada obrero Cristiano 'mire cómo sobreedifica' (v. 10).

En 3:9 Pablo se llama a él y otros ministros: 'colaboradores de Dios'. El sustantivo viene del verbo (synergeo) que significa cooperar (con), trabajar juntos. La imagen con palabras sugiere una colaboración con un propósito común. Ese propósito es llevar a las personas a la madurez y a completar la imagen de Cristo (Col 1:28-29). Los que ministran a otros deben de darse cuenta y de mantenerse en una cercana relación con Dios en donde Dios es el socio mayor. Este arreglo remueve cualquier razón para el orgullo y los motivos egoístas del obrero.

En 4:1 Pablo usa una imagen rica en palabras, que desafortunadamente está oculta en la simple traducción de 'servidores'. La palabra (hyperetes) literalmente significa remero de una galera, como un esclavo que remaba en la parte baja del barco. Llegó a usarse como un asistente bajo la autoridad de otro (cf. Mc 14:54, 65; Hch 13:5) o uno en una posición subordinada. Pablo usa esta metáfora para corregir la opinión elevada que tenían los Corintios del rol del ministro. Los obreros Cristianos no son más que esclavos. Cristo Jesús es el Amo; la tarea del obrero Cristiano es obedecer sin reservas

También en 4:1 Pablo toma la designación de administrador. La palabra (oikonomos) incluye la palabra para casa (oikos) para dar a entender al gerente de la casa. Como tal, el administrador es responsable de las propiedades y las posesiones que le confió el amo de la casa. Su tarea principal es que 'sea hallado fiel' en el desempeño de sus responsabilidades (v. 2). Los superintendentes en la iglesia son llamados administradores del ministerio (Tit 1:7) y a todos los Cristianos se les encarga que sean administradores y que usen sus dones para el servicio de otros (1 Pe 4:10). El obrero Cristiano debe darse cuenta de que el desempeño de su administración va a ser juzgado por el Señor, el Amo (v. 4). Como en la parábola de Jesús, el siervo fie les recompensado con la aprobación Bien, buen siervo y fiel' (Mt 25:23).

Dentro de esta sección específica de las Escrituras Dios les ha dado a los obreros Cristianos siete imágenes con palabras como un patrón para el ministerio. La iglesia le pertenece a Cristo Jesús; los Cristianos que sirven en la iglesia funcionan como Sus siervos. Servimos al ofrecerle el cuidado y liderazgo amoroso, servicio humilde, cultivación del crecimiento espiritual, y fortalecimiento al colaborar con Dios en un propósito común, obedecer a Dios, y fielmente administrar el ministerio que Él nos ha confiado. Debemos servir para que el centro sea el mensaje, y no el ministro. Mientras más nos conformemos a este patrón, más nos va a usar Dios para impactar a otros. Al hacer esto, estamos cumpliendo con los ministerios dados por Dios.